Nieve cálida.


El chico de cabello corto y negro, sale de su casa luego de una afable comida en familia, una navidad no fría, más bien cálida por el lugar geográfico. Decidió salir porque tenia muchas preguntas y se le iba un año mas con expectativas no cumplidas al cien por ciento, sintiéndose un tanto devastado y vacío…sus pies se dirigían solos hacia…quien sabe donde. Miro el cielo como buscando la nieve que se ve en las películas, pero lo único que obtuvo fue un diario antiguo con la imagen de un vagabundo escritor; se dio cuenta apenas le miro con mas detención, un reportaje de una plana de hace unos 6 años…lo leyó, se rió y siguió su camino con aquel pedazo de diario en el bolsillo de su chaqueta.
Se percato  de que ya era la hora de abrir los regalos en familia, pero estaba lejos de casa y no tenia intención de regresar aun, pensaba en ¿Qué tan feliz serán las personas en navidad? Se dice que todos/as son felices, sin excepción…no se lo creía, no es que el deseara la infelicidad…pero nada podía ser tan perfecto, pensaba hasta que en esa calle vacía, que unas horas antes había estado llena de gente ahora solo había nieve, el y ella…Su corazón retumbo, escucho la canción de la alegría como fondo, supo que ese día se iría de su casa sin abrir los regalos;
Se acercó lentamente hacia esa chica de cabello largo, liso y castaño…con una figura pequeña pero fuerte como un león que podría enfrentar hasta al mismo demonio, sentía su energía pero también su tristeza. Ella se percato de él, lo miro entonces…una débil voz estremeció el cuerpo de Oscar…” ¿Sabes cuanto espere aquí a papa Noel hace años?” una lagrima débil callo, era solo una niña y el un joven recientemente enamorado…Sin dudarlo la abrazo deseando por primera ves con todo su corazón que aquella chica fuera feliz en esta navidad, no sabiendo que una historia navideña había terminado, pero la historia de la vida para ellos comenzaba ahí.
 
No me mires así, tómame y abrázame. Dame una vida
mejor.

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